Milei apunta a cerrar la Casa de la Moneda con su motosierra económica

En una movida sacudida de decisiones, el Gobierno de Javier Milei ha iniciado una serie de cierres proclamando un rediseño radical del aparato estatal. Apenas transcurridas unas horas desde la disolución de Trenes Argentinos Capital Humano (DECAHF), que resultó en el despido de casi 1400 empleados, la Casa de la Moneda se encuentra en la línea de fuego.

Federando la narrativa, desde las esferas del poder resuena la voz del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, orquestando un sinfonía de reformas que pretenden amputar al menos otros cinco organismos del estado. Esto no es otra cosa que la materialización de una doctrina de eficiencia que busca racionalizar los engranajes del sector público.

Un miembro preeminente del gabinete libertario, evocando el ethos de una administración eficiente, deslizó que la clausura de la Casa de la Moneda es inminente, sugiriendo que “…va a haber cinco o seis más”. En este escenario, la emblemática institución dependiente del Ministerio de Economía contempla el albor inmediato de su cese.

Entregado al espíritu privatizador que caracteriza al gobierno, Sturzenegger ha explicado que las funciones de la Casa de la Moneda serán ofrecidas al sector privado mediante licitaciones. Incluso menciona la posibilidad de recurrir a la importación de billetes, luz de un pragmatismo que atraviesa la lógica de la administración Milei.

Tal como sucediera con DECAHF, los empleados de la Casa de la Moneda se enfrentan a la incertidumbre de la desvinculación, en una lógica implacable que ha marcado el ritmo gubernamental.

Confusamente, el vocero presidencial Manuel Adorni avaló las versiones del cierre en su cuenta en la red social X, sólo para borrar el posteo momentos después, en un giro que subraya la volátil politización del ambiente.

Las justificaciones gubernamentales para estos cierres se articulan sobre el argumento de erradicar “gastos innecesarios”. Adorni explicitó que DECAHF fue cerrada dada su improductividad como ente ferroviario. Paralelamente, presenció la disolución formal del Instituto Argentino del Transporte (IAT).

Estas determinaciones coexisten con una lista pendiente de cuatro o cinco organismos públicos sujetos a revisión por el secretario de Empresas y Sociedades del Estado, Diego Chaher, y el ministro Sturzenegger.

El Rol Crucial de la Casa de la Moneda

Históricamente distinguida por la acuñación del peso argentino, la Casa de la Moneda ha desempeñado un papel fundamental en la fabricación de documentos de seguridad, como pasaportes, y en el desarrollo de tecnología avanzada para el diseño de software de seguridad. Su extensa trayectoria desde 1875 incluye la producción de sellos postales y otros emblemas de valor.

Esta entidad esencial, por ahora presidida por Daniel Méndez, ha mantenido un compromiso con los más altos estándares de calidad, certificada por normas internacionales como la ISO 9001:2015 y la ISO 14298:21, validando su capacidad para producir billetes y productos de alta seguridad.

Estratégicamente localizadas en Retiro y Don Torcuato, sus plantas ostentan tecnología de punta en fabricación de billetes, pasaportes, y otros documentos cruciales para el país.